jueves, 14 de julio de 2011

TERCER PASO

  En este nuevo paso debemos seguir completando nuestro recorrido, añadiendo a la sesión los asanas que van a ser la columna vertebral sobre la que se base la actividad en sí.
  En primer lugar debemos asimilar que la sesión va a estar compuesta por varios tipos de asanas y dentro de ellos habrá cinco que serán la base de nuestro trabajo:
  1. Asanas frontales o de movimiento del tronco hacia delante. 
  2. Asanas traseros o de movimiento hacia detrás. 
  3. Asanas laterales.
  4. Asanas de torsión.
  5. Asanas de inversión.
  Además de estos, podemos añadir con el tiempo otros tipos de asanas como son los de equilibrio y fuerza o la combinación de ambos para trabajar con más intensidad otras facetas personales, por que, no debemos olvidar que el cuerpo y la mente están extrechamente relacionados y que cuando incidimos en uno de ellos, el otro se ve directamente afectado. 
  No obstante y antes de seguir con los asanas y la configuración de la sesión personal, asegurate de que la tonificación o el calentamiento, como desees llamarlo, es completo y el efecto secundario es bueno. Es decir, ahora lo importante es que, una vez que tienes el lugar, has decidido la hora y has tomado el compromiso, debes prácticar la tonificación hasta que sepas hacerla con los ojos cerrados y llevando tu atención a todo lo que estás haciendo, a los músculos, tendones, ligamenteos, aparato respiratorio, circulatorio, linfático, nervioso, organos y demás.  
 
  Que la luz ilumine tus pasos.