lunes, 2 de febrero de 2015

La enfermedad sólo puede venir del cuerpo o de la mente



Todos queremos vivir una vida sin dolor, sin enfermedad y los inconvenientes que ésta conlleva. Para lograrlo, debemos plantearnos un estilo de vida que proporcione salud al cuerpo y a la mente ya que la enfermedad sólo llega a través de ellos.  

Para mantener el cuerpo sano debemos seguir varios hábitos:

1.     Mantén limpio tu cuerpo interior y exteriormente.

El cuerpo se mantiene limpio a través de una alimentación sana y energética. La alimentación sana y energética se extrae de las frutas y verduras ecológicas (debido a los sistemas actuales de producción), lo que se traduce por una alimentación sana y libre de toxinas, cuando se han acumulado por los inevitables focos que las producen, con enemas de café, lo cual sabremos cuando aparezcan los primeros síntomas de enfermedad en el cuerpo.  

El cuerpo se mantiene limpio exponiéndolo a lugares que estén limpios y naturales. En caso contrario necesitaremos limpiarlo exteriormente con agua filtrada libre de elementos químicos que puedan traer enfermedad y con productos de higiene sanos tanto para ti como para la tierra. Si vives en un sitio contaminado será útil usar filtros en los elementos por donde salga el agua que usas para la limpieza corporal.  

2.     Mantén limpia, clara y lúcida tu mente.

La mente se mantiene limpia en la presencia, la observación y el buen uso del poder interno.

Para mantener la presencia habrá que ser diestro en respirar de forma consciente. De esta forma nos será fácil usar sólo elementos (tanto en forma de ideas como de imágenes) que tengan una frecuencia amorosa y alta. 

Para ser un buen observador, habrá que hacerse hábil en estar pendiente de forma consciente del proceso mental (tanto en forma de imágenes como de ideas) para llevarlo hacia los senderos que nos traen sabiduría, conocimiento y amor hacia todo lo que nos rodea.

Para generar un buen uso de poder, habrá que estar conectado con la respiración (presencia), hacer una lectura constante y sabia de la mente (ser un buen observador) y, desde allí, proyectar nuestra mejor intención vital interna hacia todo lo que nos rodea, incluidos nosotros, haciendo de nuestra existencia un puente de crecimiento para nosotros y los demás en el planeta Tierra.  

Como ves, en este proceso mental hay tres filtros que te ayudarán a usar de una forma elevada tu oportunidad vital.

Un abrazo, herman@.


FUENTES DE INFORMACIÓN:


La terapia Gerson, Hipócrates, Yoga en general.